sábado, 29 de septiembre de 2007

¡Que rico es coger!!
















Se puede coger con la persona amada, es genial, y divino.Nada tan animal como verle la cara al compa con sus ojos deshorbitados cuando está dele que dele, mirándolo a uno, un acto salvaje, antiquísimo como la humanidad misma...
Pero que pasa, cuando el compa no está, o no hay compa, y uno esta en esos días post regla, que a uno se le sube toda la hembra, y no hay macho que uno vea que no sea una posible presa????Cuando los ovarios y la fantasía ven en los hombrecitos cotidianos a ese ser que le podría dar unos instantes de felicidad carnal?
Y cuando ya uno tiene a un mae en la mira...que de solo verlo pasar se le caldea el día!!! Ojalá vuelva a ver el desgraciado, y empiece ese juego de la conquista a puras miradas...porque la pega es ponerse a hablar, y empezar con esas habladitas....
Nada como decirle,-Vamos.-¿A donde?-A un hotel... Ojalá al mae se le prenda la chispa y se de cuenta que la vara es directo al grano....nada de introducciones, ni habladas....directo al grano, que esto ya está cocinado....que haciendo el amor nos vamos a conocer, pues es una forma pura de comunicación...
Parece mentiras pero eso de que los maes siempre quieren hacer el amor, es puro cuento.... A mas de uno se le para el pelo, una vara directa, y menos si es la mujer la que toma la iniciativa.... He visto varios maes que se les llena la cabeza de varas...y rollos...a veces creo que están en ese sentido peor que las doñas...
Los gays, me parece son más directos, he visto como se pasan numeros de telefono, o en un bus jalan directo al lecho....
Pero los heterosexuales, me parece estamos más llenos de tabues, con las ideas del amor, y la pareja, la fidelidad, la familia, nos tenemos que echar los tapis, o quien sabe que, a ver si acaso se nos sale el animal que llevamos adentro....
El asunto es que coger, es algo tan necesario, y saludable, nos hace sentir vivos, llenos de energía, es un momento de estar con la otra persona en su totalidad...

Fotos robadas de

Las llaves de la sexualidad
visión pleyediana II